

Asics Gel Nimbus 23, uno de los modelos más populares de la marca gracias a su comodidad en los entrenos del día a día. Y en esta nueva versión Asics afirma que la han hecho todavía más cómoda y estable.
Pero ¿realmente es tan cómoda como dicen o es una zapatilla más de entrenamiento?
Sigue leyendo y te cuento todas mis sensaciones.
En Singapur, desde los corredores que empiezan en el running hasta los maratonianos más experimentados, la serie Nimbus es uno de los modelos que más verás en tus entrenos a orillas del río o alrededor de la bahía.
Nunca he llegado a entender la enorme popularidad de las Nimbus. El último modelo de Nimbus que probé en un test organizado por la tienda de Asics de Madrid fue la versión 19 y la verdad que no me impresionó mucho.
Como dato curioso, el nombre de la zapatilla le viene dado por una nube de lluvia. Según esto se supone que la Nimbus es la zapatilla más suave y amortiguada de la casa Asics, pero lo que noté en la Nimbus 19 era dureza y una reacción aburrida.
Asics afirma que la Nimbus 23 ha sido actualizada para ser más estable y tener una transición en la pisada más suave que la Nimbus 22. También ha sido diseñada para tener una amortiguación GEL más suave y una mayor compresión en el talón.
¿Verdaderamente la Nimbus 23 ha cambiado tanto como afirma Asics? ¡Vamos a comprobarlo!
Cuando vi por primera vez fotos de la Nimbus 23 antes de su lanzamiento, la única diferencia que pude ver respecto a su anterior versión fue en la suela.
Asics había rellenado la zona del arco para eliminar ese hueco extraño que había en la Nimbus 22.
Sobre su aspecto, la veo una zapatilla muy chula, es realmente bonita y tiene detalles que solo los vas a ver cuando las tengas en las manos.
La sensación al ponérmelas por primera vez fue genial, lo que más destaca es su comodidad y lo bien que se ajustan, parecen hechas a medida.
Mi primera salida fue de 10 km, a un ritmo medio de 5:25 min/km, y me sorprendió mucho su acolchamiento, protección, comodidad y suavidad, es como si ya llevara unos cuantos entrenos con ellas.
Una de las cosas que más me gustó es la espuma blanda (que es como una espuma tipo «memory») que se encuentra justo debajo de la plantilla y que notas en cada pisada. Esta espuma es exclusiva de la Nimbus, y que yo recuerde, no se parece a ninguna otra zapatilla que haya probado, tal vez las Skechers.
- Tremendamente cómoda
- Sensación única en la pisada
- Diseño y acabados excelentes
- Su suela es muy mala
- Precio elevado
La espuma Flytefoam de la mediasuela se siente menos pesada y más reactiva que en la versión anterior.
Se parece más a la espuma Flytefoam Blast utilizada en la Asics Novablast.
La Nimbus 23 tiene una capa inicial esponjosa directamente bajo el pie y luego se vuelve más firme a medida que te acercas a la suela. Es una configuración de espuma dual con Flytefoam (que es EVA) como componente principal. En el retropié, encima de la Flytefoam está la Flytefoam Propel, que es una mezcla de EVA y TPU. Ambas espumas tienen una densidad muy similar, por lo que la sensación que te va a dar es muy suave y uniforme.
La capacidad de respuesta es buena, se nota una ligera elasticidad y esto te permite rodar de forma fácil por debajo de 5:00 min/km con poco esfuerzo. Aunque donde verdaderamente las vas a disfrutar es en tus entrenos de 10-14 kilómetros a ritmos superiores a 5:00 min/km.
En tiradas largas vas a echar de menos algo de dureza ya que pasados los 18-20 kilómetros tendrás la sensación de estar luchando contra la espuma, es como si corrieras sobre un colchón viscolástico que absorbe tu energía y no te deja avanzar.
Con esto no quiero decir que sea una mala zapatilla, simplemente las Nimbus 23 funcionan mejor como zapatillas de entrenamiento diario y que dejaremos aparcada el día que nos toque esa tirada larga.
La estabilidad es buena gracias a su mediasuela que se ensancha ligeramente hacia fuera y crea una base amplia. La verdad que en este aspecto no encontré ningún problema.
En la suela encontramos dos tipos de gomas: AHAR en el antepié y en la parte del retropié AHAR+ más duradero para el talón.
Creo que Asics no ha acertado en la colocación de las gomas porque el lateral del talón, que es el contacto inicial con el suelo para muchos runners, está cubierto por el AHAR en lugar del AHAR+.
La verdad que por el precio que tienen podrían haber cubierto toda o gran parte de la suela con AHAR+ como en la Asics Novablast, de esta forma la duración de la zapatilla sería mucho más larga. Os cuento esto porque en unos 110 km ya se notaba el desgaste en la suela, esto es un fallo que siempre he visto en asics, son tremendamente cómodas pero la duración de la suela es corta.
Otro fallo de la suela es que en uno de los entrenos se puso a llover fuerte y la sensación de resbalón fue tremendo. Por tierra bien, pero por adoquín y baldosa mojada, la goma se vuelve chirriante y ruidosa además de esa sensación de resbaladiza. En este aspecto punto negativo.
El upper es cómodo y acolchado, como debe ser en unas zapatillas de amortiguación máxima, de verdad que son realmente cómodas ¡Con bien de espuma!
En esto Asics ha hecho un buen trabajo, su ajuste a la talla, su amplitud en la parte delantera para los dedos y su ajuste del talón es perfecto.
Su lengüeta es gruesa, acolchada y muy cómoda ¡como debe ser en este tipo de zapatilla! Está unida a una funda interior para no producir deslizamientos de la misma.
Los entrenos de test lo hice en días fríos y la malla me resultó muy confortable, no sé si en días calurosos ese confort no será tal. Creo que es una zapatilla con buena transpirabilidad y que no vamos a tener problema ya que bajo la lluvia la malla se comportó muy bien.
Una zapatilla de running de gama alta debería ser especial cuando corres con ella y la Nimbus 23 definitivamente lo es. Tiene todos los aspectos y sensaciones que esperas en una zapatilla de este tipo.
Sin duda, lo que más me ha gustado y entusiasmado es el «aplastamiento» que sientes bajo el pie y su parte superior que es realmente cómodo. Salir a correr con ellas a diario es una maravilla.
Como ya he mencionado antes el talón de Aquiles de esta zapatilla es su suela. La goma se desgasta rápido, es resbaladiza en superficies húmedas y demasiado blanda para carreras largas. Esto es algo que Asics debería mejorar.
Resumiendo: La Asics Gel Nimbus 23 es una excelente zapatilla de entrenamiento diario, comodísima y suave, para esos entrenos de no más de 14 kilómetros y a ritmos superiores de 5:00 min/km aunque por la elasticidad que tienen nos van a permitir subir el ritmo sin problemas.
A destacar la sensación de la pisada, ¡una maravilla!
Si eres un fan de la serie Nimbus, este nuevo modelo te va a encantar 😉
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